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Foto del escritorRedacción Relax

Drunch, nueva tendencia gastronómica



Si ya escuchó el término drunch, seguramente, se está preguntando qué significa y en qué consiste. Este nuevo concepto gastronómico nació en Nueva York, aunque alcanzó gran popularidad en Europa, y se refiere a un tipo de merienda-cena. La palabra es la composición de dos palabras inglesas: dinner y luch, es decir, cena y comida, y lo que pretende es definir a una comida que se hace en la tarde-noche.

 

Esta práctica fue adoptada rápidamente en países como Italia, Inglaterra y España, ya que, por lo regular, en estos lugares, se suele cenar alrededor de las siete de la tarde, y como el drunch está pensado para realizarse entre las 6:00 y las 9:00 p. m., se moldeó adecuadamente a sus horarios.

 

Es por eso que el drunch queda perfecto para realizar una reunión con amigos o familiares. De hecho, es la actividad ideal para relajarse después de un día de pesado trabajo; razón por la cual su popularidad se va extendiendo a más países. En las ciudades españolas de Madrid y Barcelona, esta tendencia ha sufrido algunas modificaciones, pues le han añadido la moda de los roof-top, para disfrutar del drunch al aire libre. Sin embargo, esta actividad se puede disfrutar en cualquier sitio, como en la propia casa.

 

Ahora bien, si se pregunta qué se come en un drunch, la respuesta es sencilla. En esta clase de reuniones, es normal ver platos pequeños con porciones pensadas para comerse de un bocado, como las tapas o medias raciones. Es decir, lo que se les ofrece a los invitados son mini presentaciones de recetas suculentas, aunque un tanto informales.

 

Visto desde otro punto de vista, es una especie de merienda sofisticada, hecha para convivir y compartir. Aunque lo más llamativo de esta nueva tendencia es que no sólo se come, también, se bebe. Al ser un horario vespertino, es una buena oportunidad para tomar una cerveza fría, algún cóctel o una copa de buen vino. Asimismo, se puede incluir algún postre, aunque no es del todo obligatorio.

 

Es por estas características que el drunch va ganando popularidad. Y es que quién no quiere pasar una tarde con su círculo cercano, disfrutando de una buena comida y bebida. Sin duda, gracias al drunch, se puede crear el momento oportuno para poder conversar y distraerse del día a día; y todo, en compañía de sabores dulces y salados: bocadillos pequeños, que no entorpecen la charla.

 

Cómo organizar un drunch

Desde el principio, es bueno que los bocadillos estén listos, porque hay que tener presente que el picoteo es lo que suplirá a la cena, la cual suele ser más formal. Las elaboraciones tienen que ser sabrosas, pero de proporciones pequeñas. En realidad, lo más difícil de este paso es elegir entre la gran cantidad de opciones de platillos.

 

En algunas ocasiones, dependiendo del tipo y la cantidad de invitados, es mejor poner más de una opción, para que, así, haya variedad y los comensales puedan degustar lo que sea más de su agrado. También, es importante que haya suficiente para todos y que nadie se quede con hambre.

 

Entre los bocadillos que se pueden ofrecer, están: mini sándwiches, canapés, brochetas, tapas, etcétera.

 

En cuanto a la bebida, ésta tiene que ir en armonía con los platillos. Recuerde que la fusión debe encantarle a todos, por lo que prestar atención a los sabores y combinaciones es de crucial importancia. Como en las bebidas hay muchas opciones, se puede elegir tanto cerveza como vino, aunque hay quienes prefieren la coctelería y ofrecen mojitos o gin tonics. Como las bebidas son un elemento fundamental en estos eventos, hay quienes aseguran que la ‘d’ de drunch, en realidad, hace referencia a la palabra drinks (bebidas).

 

Es posible que a las personas que no estén familiarizadas con esta práctica les parezca una comida llena de mezcolanzas. Sin embargo, siempre hay oportunidad para experimentar un poco, y qué mejor que intentar disfrutar el momento con platos variados y llenos de sabor. Lo importante es salir de las comidas rutinarias y compartir con nuestras personas más cercanas.

 

¿Qué le parece este plan? El drunch es una experiencia que llegó para quedarse, así que no se quede con las ganas de intentarlo y disfrute una tarde-noche especial, con la gente que más quiera.

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